La Isla de Orabá es un encantador oasis verde en el corazón de Culiacán, ubicado donde confluyen los ríos Tamazula y Humaya para formar el río Culiacán. Este espacio natural es conocido por su ambiente tranquilo, ideal para actividades al aire libre como caminar, correr o andar en bicicleta. Además, es parte de un importante corredor ecológico que incluye el Parque Las Ribera. Una de las principales características de la isla es su papel como santuario de la iguana verde, un reptil emblemático para la región. Desde 2016, ha sido protegido por la SEMARNAT debido a su importante rol en la reforestación natural. Más de 300 ejemplares de iguanas verdes habitan en los árboles de la isla, coexistiendo con los visitantes y convirtiéndose en un símbolo de conservación en Culiacán. Además de su biodiversidad, la Isla de Orabá ofrece espacios recreativos para familias, con áreas de juegos infantiles, asadores y mesas para convivir. Gracias a su cercanía con el centro histórico, la isla se ha consolidado como una parada obligada para quienes buscan disfrutar de la naturaleza y la cultura local.