El centro histórico también es un lugar lleno de vida comercial, con calles peatonales y mercados que ofrecen una experiencia única, donde es posible encontrar productos locales, artesanías, y probar la gastronomía típica de Sinaloa. Además, las plazas y parques del centro ofrecen un respiro para quienes desean disfrutar de la tranquilidad en medio de la bulliciosa vida urbana. Entre los tesoros del centro destaca el Paseo del Ángel, una calle peatonal que se ha convertido en un ícono del renacimiento cultural de la ciudad. Recientemente nombrado el primer Barrio Mágico de Sinaloa, el Paseo del Ángel es un corredor lleno de vida, arte y gastronomía. Ubicado sobre la calle Ángel Flores, este paseo cuenta con una variada oferta de restaurantes, bares y cafeterías, donde los visitantes pueden disfrutar de una experiencia culinaria única, que incluye desde comida tradicional hasta propuestas gourmet. Durante los fines de semana, el Paseo del Ángel se transforma en un punto de encuentro cultural, con música en vivo y eventos artísticos que atraen tanto a locales como a turistas. Este atractivo turístico ha sido clave en la revitalización del centro, fomentando el turismo cultural y generando un ambiente vibrante y moderno en medio de la historia de Culiacán. Sus calles adoquinadas, faroles antiguos y las coloridas fachadas de los edificios crean un ambiente encantador que invita a recorrerlo a pie y descubrir los secretos que guarda el corazón de la ciudad. Además, el paseo está rodeado de museos y centros culturales que complementan la oferta, haciendo de este lugar una parada imprescindible para quienes deseen experimentar lo mejor de Culiacán. El Centro Histórico de Culiacán y el Paseo del Ángel no solo representan el pasado de la ciudad, sino también su futuro, con una combinación perfecta de tradición, cultura y modernidad, que hacen de este lugar un destino inigualable para cualquier turista que desee conocer la esencia de la capital sinaloense.
